PRIMERA Y ULTIMA CURSA BOMBERS BARCELONA (a no ser que cambie mucho)

todos Bombers

Ayer por la noche corrimos la Cursa Bombers de Barcelona. Una carrera que hacía tiempo que me apetecía correr pero al coincidir con otras carreras o no conseguir dorsal no había podido ser. La imagen que tenía yo de esta carrera era de una carrera seria y con un prestigio importante, aunque me empezó a desconcertar el ver que no se colocaba en el calendario de carreras en las fechas habituales, se generaban rumores, que si iba a ser de noche, que sería una fiesta, que se esperaba una gran participación, y Nike haciendo una campaña en la que nos dejaba a todos esperando expectantes la inscripción.

Y el primer día la hice, bien prontito, para no quedarme sin ella. La mía y la de Rubén. 40€ de golpe, así, sin pensar, porque «había que conseguir un dorsal». Qué borrega llego a ser a veces. El proceso de inscripción ya presentaba ciertas dudas, por un lado el precio, y cuando llegué a la parte en la que te dicen que si quieres que te lleven tu bolsa de la salida a la llegada, te va a costar 3€, empecé a pensar que me estaban tomando el pelo. Y yo me lo dejé tomar, llevada por la «locura» de participar en Bombers, al menos una vez, para vivir lo que es (que parece ser que no tiene mucho que ver con otras ediciones anteriores), aunque no pagué los 3€ ya que tenia otras alternativas para llevar mis coses a la llegada.

Una cosa qué sí estaba bien (no voy a decir solo lo malo, hay que ser justos), es que pudieras elegir con antelación el día de recogida de dorsal. Una clara táctica comercial de Nike, así, si vas tranquilito y sin agobios igual te paseas por toda esa exposición de colores y modelos que tienen en la tienda y «cae» algo. Esta vez me recogieron la camiseta, así que yo no pasé por la tentación (porque lo confieso, a pesar de la antipatía que cada vez siento más aguda por Nike, hay que reconocer que sus diseñadores son la bomba). Pero cuando mi compañera Mireia, que fue quien nos recogió la camiseta, y mi acompañante-apoyo en la carrera, me mandó un Whatsapp diciéndome que ya lo tenía y que solo iba la camiseta, mi opinión sobre Nike empeoró apareciendo la palabra «tacaños» en mi saco de opiniones sobre la marca. La camiseta, en cambio, me gustó. La encontré suave, ligera, y no parecía una morcilla con ella, cosa importante.

Y llegó el día. No estaba con Olga Bombersmuy convencida del resultado. Viernes noche, día laborable,… A partir de ciertas horas mi biorritmo empieza a decaer, y temía no estar suficientemente activa para ese momento. Por la tarde había descansado un poco, pero siendo madre es difícil. Además hacía mucho calor y humedad, el enemigo número uno de muchos corredores, y yo me incluyo entre ellos. Rubén no llevaba demasiadas buenas sensaciones encima. Se notaba cansado, pesado, y eso a mí no me ayudaba. A pesar de ello, al llegar al punto de encuentro con Mireia y Olga (otra corredora de Espacio de Corredoras), me animé, junto con la música y el ambiente.

Una puesta en escena que quería impresionar, con DJ, música cañera, las fuentes de Montjuïc, la gente expectante, el speaker animando…. Me pareció bien la rigidez de la colocación de los corredores en los cajones, controlando que los corredores se posicionaran en el cajón de su marca acreditada.

En el caso de Rubén, como en el momento de la inscripción no podía acreditar que estaba en menos de 42′ porque aún no había corrido la de Guardia Urbana y en la BDNRunning se había dejado el chip en casa con lo que no le quedó la marca registrada, salía en el cajón de 45′ y se encontró con cierta dificultad para correr fluido en la salida. En mi caso la salida fue más o menos bien, teniendo en cuenta la cantidad de corredores.

El Paralelo, a pesar de ser bajada, se hace largo, y parece que salga fuego del suelo. Paseo Colón, después de pasar las Ramblas, se hizo un poco estrecho y agobiante. El calor, la humedad, los olores, los sudores….era muy agobiante. Mis sensaciones del kilómetro 3,5 al 5 fueron muy malas. Me sentía agobiada, falta de energía, a pesar de los constantes ánimos de Mireia que llevaba un subidón encima impresionante.

Esta mañana, en el II Taller de Espacio de Corredoras comentaba con Olga que a veces el estar tan pendiente de la marca te hace no disfrutar de las carreras. Este es un pensamiento que me ronda mucho últimamente, en las carreras, en algunos entrenamientos. Una vez me propuse bajar de la hora en las carreras me impuse un plus de presión a mí misma, de manera que me condiciona mucho mi estado de ánimo antes y durante la carrera. El subidón después es impresionante, si he conseguido mi objetivo, pero casi igual de impresionante es mi decepción si no consigo lo que me he planteado, o he avanzado poco. Sé que no tendría que ser así, me lo repito constantemente, pero la exigencia forma parte de mí.

El hecho de que no quería hacer peor tiempo que en la Cursa Dir me estaba condicionando, i correr con una persona con 10 años y 15 kilos menos que yo, me condicionaba y me «bloqueaba». La presión me la creaba yo, lo sé. Además, viendo que Mireia está evolucionando mucho, no quería «frenarla». A pesar de eso, ella siguió conmigo hasta el kilómetro 8,5 animándome todo el rato.

En cuanto a los avituallamientos, estuvo bien que dado el calor hubiera dos, aunque si se suponía que era una carrera de nivel, esperabas que el agua estuviera fría. En cambio, estaba caliente como un caldo, dada la temperatura ambiental. Y agradecer la remojada de los bomberos en la Diagonal, aunque hubiera estado muy bien que hubiera un par más en otros puntos. El bochorno era horroroso.

Las batucadas también ayudaban. Por lo menos te animaban el tramo donde estuvieran situadas.

En estas carreras tan masificadas te sueles encontrar con corredores de «postureo» que nada saben de civismo. La cantidad de gente que se me cruzó peligrosamente. Incluso me dieron con una botella que alguien tiró desde el medio de la calle hacia la acera. Algo muy peligroso que me podía haber hecho caer.

El anticivismo se acentuó en los últimos 500 metros. Como era imposible esprintar por la cantidad de gente que había, los listos se dedicaban a dar codazos para meterse entre dos personas y cruzarse peligrosamente.

La llegada fue de libro. Prácticamente andando. Gente parada antes de pasar por el control de xip, o bien por hacerse la foto, o bien por el embudo que se había formado. En mi vida de runner no había vivido una llegada tan caótica, pagando 20€. El resultado fue 59’59», 1 minuto y 7» más que la Cursa Dir.

Después la «pateada» hasta el avituallamiento final, que si llegamos a saber lo que era se lo regalábamos a Nike. Una botella de agua y una bebida isotónica calientes. Increíble!!! En todas las carreras que he participado las bebidas eran frías!!! Los pobrecitos Sres. de Nike no tienen para poner neveras pero sí DJ?

En definitiva, una carrera para olvidar, o no, para aprender dónde no meterse y en quien no confiar. Nike, en esta ocasión, ha sido un mal organizador.

11 pensamientos en “PRIMERA Y ULTIMA CURSA BOMBERS BARCELONA (a no ser que cambie mucho)

  1. Bueno, al menos puedes decir que corriste una vez esta carrera y que, visto lo visto, será la última.
    Yo la verdad es que las carreras tan masificadas no me gustan, como dices en según que tramos no se puede ni correr. Hoy en día se aprovechan del boom de running, algunas inscripciones son abusivas y para colmo la bolsa del corredor y los servicios que dan no están a la altura de lo que se paga.

    Un besazo y a por la próxima carrera.
    María
    http://www.jewelrunner.blogspot.com

    Le gusta a 1 persona

  2. Hola!!! Las carreras multitudinarias son así, no sé por que os sorprendéis y en viernes noche, que la gente no trabaja???. Además de todo lo que comentáis, yo estaba de público en el km5,5, donde había una ambulancia. Tal como estaba preparado el puesto, si hubiera una emergencia, la ambulancia no podía salir. Cual fue mi sorpresa el sábado por la mañana, cuando me enteré que hubo una parada cardíaca (no sé en que punto de la carrera) y la ambulancia más cercana no pudo salir y atender al corredor. No sé si ha muerto o no. Tampoco sale en prensa.
    Ahora, cuando el año que viene cobren 30€ y quieran congregar a 30.000 corredores, todos deprisa a comprar el dorsal, no vaya a ser que no sea uno de los «héroes» que estuvo el día del gran evento.
    Un saludo…

    Le gusta a 1 persona

    • Cursa Bombers era una carrera con reputación, seria, por eso quería participar en ella. Ya he visto que cada vez la seriedad va a menos. Punto. Con no volverse a apuntar solucionado.
      Aunque no debería ser así. Quizás debería haber una regulación más estricta en cuanto a aforo y atención médica.

      Me gusta

  3. Hola Marisa!! Qué tal estás?? espero que ya totalmente recuperada! Estoy muy desconectada y no tenía ni idea de lo que te había pasado… Estuve mirando vuelos a Barcelona para ir a esa carrera y al final por precios decidí no ir. Las carreras ya lo comentamos una vez se están convirtiendo en un negocio muy rentable y ya no importa como se gestione, solo el dinero, es triste y vergonzoso… Por cierto, no fui ese finde a Barcelona pero voy el mes que viene!!! Así que tenemos que hablar! Un besazo!!

    Le gusta a 1 persona

    • Guapa! Pues venga, hay que quedar! Ya me irás informando de cuando vienes.
      Cursa Bombers ha perdido en esta edición su esencia y sí, se está llegando a un punto que ahora entiendo muy bien a gente que me decía que ya no participaba en cursas conocidas y se decantaban por las minoritarias.

      Me gusta

Deja un comentario